miércoles, 25 de junio de 2014

segundo control de lectura



CONTROL DE LECTURA

APUNTES PARA UN ESTADO PLURINACIONAL

 

I.-         INTRODUCCIÓN.

Desde la victoria electoral de Evo Morales, se empezó a hablar de dos Bolivias una en el occidente indígena, subdesarrollada y pobre y la otra oriente moderna con mestizaje regional, exportadora y prospera; este una en el occidente indígena, subdesarrollada y pobre y la otra oriente moderna con mestizaje regional, exportadora y prospera. La existencia de estas dos Bolivias tuvo dos respuestas en la década del 2000, una por la elite asentada en Santa cruz y la otra por los movimientos indígenas y populares. Es así que se dio una consolidación política indígena y popular, pero el oriente trato de avanzar en la separación real de estas dos densidades sociales y no acepta la búsqueda de la descolonización que implica renunciar a los privilegios.
El proyecto nacional mestizo que nació en 1952 se haya convertido en un regionalismo nacionalista que sueña con un Estado-nación con una sola lengua, cultura y territorio.
Esta época hace emerger dos problemas uno que implica pensar al movimiento indígena como un sujeto articulador de lo plurinacional y el otro que se haya generado una intersección entre el horizonte de liberación indígena que podría implicar un proyecto plurinacional.
Este ensayo plantea que el movimiento indígena popular está constituyéndose un proyecto plurinacional que articula al pueblo, que podría generar la suficiente fuerza social movilizada en las calles garantizando que no se repita la dominación de un sector de la sociedad sobre otro, como fue en la articulación de la Media Luna.
Es necesario diferenciar dos dimensiones de lucha política de las organizaciones indígenas en el despliegue, uno en tanto oprimidos y por tanto interiores al orden moderno colonial y otra con excluidos, como exterioridad de ese orden. La exclusión implica una visión más integral de su condición.        
 
II.-       DESARROLLO.
La lectura indica la existencia de dos Bolivias, una en el Occidente indígena, subdesarrollada y pobre y la otra Oriente moderna con mestizaje regional, exportadora y prospera, la existencia de estas dos Bolivias tuvo dos respuestas en la década del 2000, una por la elite asentada en Santa cruz y la otra por los movimientos indígenas y populares; es así, que se dio una consolidación política indígena y popular, pero el oriente trato de avanzar en la separación real de estas dos densidades sociales y no acepta la búsqueda de la descolonización que implica renunciar a los privilegios.  Esta época hace emerger dos problemas uno que implica pensar al movimiento indígena como un sujeto articulador de lo plurinacional y el otro que se haya generado una intersección entre el horizonte de liberación indígena que podría implicar un proyecto plurinacional.
Es necesario diferenciar las dos dimensiones de lucha política de las organizaciones indígenas en el despliegue, uno en tanto oprimidos y por tanto interiores al orden moderno colonial y otra con excluidos, como exterioridad de ese orden. La exclusión implica una visión más integral de su condición.       
 
III.-      Conclusión.
         La existencia de dos  Bolivias da  a una consolidación política indígena y  popular     no acepta la búsqueda de la descolonización que implica renunciar a los privilegio, por esta razón es necesario diferenciar las dos dimensiones de lucha política de las organizaciones indígenas en el despliegue, uno en tanto oprimidos y por tanto interiores al orden moderno colonial.

No hay comentarios:

Publicar un comentario